Roberto Natalio Zenobi es un ingeniero en Minas que confiesa que abrazó esa actividad desde ese día que, cursando el quinto año del secundario de la escuela comercial de Rivadavia (lugar donde nació y creció), elaboró por primera vez un informe sobre producción minera a instancias de su hermano mayor, quien para ese entonces ya era ingeniero con esa especialidad.
Hoy con casi 70 años y habiendo recorrido desde febrero de 2021 su experiencia como responsable de la Dirección General de Minería (tal cual es la denominación institucional) decidió conceder una entrevista periodística desde ese lugar, como parte del gobierno provincial.
El hombre, hijo de familia de inmigrantes italianos, pone mucho énfasis en su origen y en su desempeño de vida y profesional para transmitir su idea con la que se impulsó para ser funcionario habiendo intentado ser legislador por el Partido Intransigente en 2019. Pero antes trabajó en la actividad gremial empresaria del sector presidiendo la Cámara Mendocina de Empresarios Mineros (Camem) desde donde resistió desde 2007 la creación y la aplicación de la norma restrictiva a la actividad minera a cielo abierta, la emblemática ley 7722.
El tiempo transcurrió y Zenobi se reinventó desde su idea estructuralista para implementar políticas públicas dentro de la actividad, enfocando su acción en la minería de segundo y tercer grado, es decir en canteras de áridos y explotaciones de minerales no metalíferos vinculados con la industria de la construcción en su mayoría.
Su fin último lo transparenta hoy, miércoles 30: demostrar que en Mendoza hay actividad minera y que se puede desarrollar minería metalífera (de primer grado) con un orden administrativo y legal que la encuadre y la haga posible.
Después de conversar por más de dos horas y media en su despacho ubicado en el edificio de calle Boulogne Sur Mer al 3000 de Ciudad, las explicaciones de Zenobi trascendieron como la descripción de un tratamiento de readaptación, después de una fractura grave que sufrió la sociedad mendocina, en particular luego de diciembre de 2019 tras las manifestaciones multitudinarias que hicieron que se reestableciera la 7722 tras el intento de derogarla ni bien había asumido como gobernador Rodolfo Suarez.
enobi dejó ver este desarrollo de su gestión el martes 22 en el foro “El rol de las provincias en el desarrollo minero argentino”. En ese ámbito amigable para la actividad detalló su esquema de plan de gobierno y transparentó su propósito de convertir el organismo que durante mucho tiempo estuvo opacado como un sistema de alarma de control para otro entes estatales de control y fiscalización como es la la tributaria recaudadora ATM y las de mantenimiento de rutas como Vialidad nacional y provincial.
Pero también soltó como una pista de su próxima acción con impacto público, quizá su última como director de esta gestión de gobierno. Anticipó que su objetivo inmediato es mandar a la Legislatura antes de fin de año un nuevo proyecto de exploración de una mina de cobre, similar a Cerro Amarillo. Nunca reveló cuál era el proyecto.
Aquí acepta que aún no tiene decidido cuál será, aunque remarcó que tiene una grilla de unos cuatro expedientes que están en la misma línea de condiciones para ser presentados. Entre ellos se encuentra el postergado proyecto cúprico y aurífero de San Jorge que cumple con la legislación vigente en la región cordillerana del Valle de Uspallata, esta posibilidad la aportan otras fuentes mineras del sector privado.
Otro aspecto al que le da valor el experimentado Zenobi es el recorrido del proyecto ferroso de la antigua mina de Hierro Indio donde se supo extraer el metal en época de la Segunda Guerra Mundial. El proceso de exploración resultó exitoso por la descripción y la documentación de imágenes aéreas y analíticas que Zenobi mostró durante la entrevista.
FUENTE: mendozapost