Verónica Magallanes luchó por su vida durante horas, pero las graves heridas sufridas tras ser atacada por su ex pareja resultaron irreversibles este martes por la mañana. La mujer de 49 años falleció a las 9.30 en el Hospital Lagomaggiore, donde había sido ingresada un día antes con el 90 por ciento del cuerpo quemado.
Su hijo, Mariano Celedón, de 32 años, continuaba pasadas las 10, internado en estado crítico, también con el 90 por ciento del cuerpo comprometido por lesiones producidas por las llamas. El joven había intentado salvarle la vida a la mujer que el sospechoso, su padre, prendió fuego el domicilio ubicado en el oeste de Capital.
El brutal ataque ocurrió en un asentamiento cercano al barrio San Martín. Según la investigación que lidera la fiscal Andrea Lazo, Rolando Celedón, de 52 años y policía exonerado en el 2006, llegó a la precaria vivienda de su ex pareja durante la madrugada del lunes, la roció con un líquido inflamable y prendió fuego mientras ella y su hijo dormían. Al percatarse del incendio, el joven intentó socorrer a su madre, pero ambos resultaron con heridas de gravedad.
Vecinos alertaron a la Policía y fueron los primeros en asistir a las víctimas, trasladándolas en un auto particular hasta el hospital cercano. Cuando llegaron los efectivos, el propio Celedón les abrió el portón de la vivienda con evidentes quemaduras en sus pies. Fue detenido de inmediato y quedó internado bajo custodia en el mismo nosocomio.
Un informe médico reveló que el ex policía la mañana de este martes que se encontraba en recuperación.
La fiscal Lazo tenía pensado imputar al sospechoso por femicidio y tentativa de homicidio agravado y las lesiones graves de su hijo. Sin embargo, ante el fallecimiento de Magallanes, de quien se había separado hacía un mes, la calificación pasaría a femicidio, arriesgando prisión perpetua si es hallado culpable.
Fuente: www.elsol.com.ar