El gobierno de Alfredo Cornejo concretó el remate de la mansión del exintendente Luis Lobos (PJ), luego de un juicio de Extinción de Dominio. Es la primera vez en Argentina que los fondos de una subasta de un bien mal habido por corrupción vuelven al Estado. La propiedad se remató por $172.241.977,30. La puja fue entre 6 oferentes y el ganador tiene domicilio en Guaymallén.
La Ley en Mendoza establece que los bienes que provengan de delitos de corrupción se vendan y sus fondos se deriven a la reparación de establecimientos escolares, como una forma de resarcir a la sociedad. La base en un primero momento fue de más de 60 millones pesos.
La provincia es pionera en la materia.
La subasta se realizó vía on line y debía finalizar a las 13, pero una fuerte puja entre 6 oferentes aplazó el procedimiento para que se vendiera al mejor postor. Si bien no se puede conocer la identidad del comprobador, porque está bajo un alias, tiene domicilio en Guaymallén, precisamente donde está ubicado el inmueble.
El pago es contado, de acuerdo con las indicaciones de la martillera María Manucha, a cargo de la operación.
Para qué usará la DGE el dinero del remate de la mansión de Lobos
Conforme a la Ley N° 9.151 de Régimen Procesal de la Acción Civil de Extinción de Dominio, la casona que pertenecía la ex jefe comunal de Guaymallén pasó a ser parte de los bienes del Estado, a través de un fallo de la jueza María Paz Gallardo, quien estableció además la constitucionalidad de la norma en 2021.
A partir de ahora, la DGE utilizará la millonaria suma en la reparación de los establecimientos educativos.
A la par, hubo un proceso penal que comprobó las maniobras que realizó el ex cacique para desviar fondos de la Municipalidad en el proyecto de esta mansión, cuyo lote es 1660 metros cuadrados y se ubica en el barrio privado Alto Portal del Sauce en Guaymallén.
Lobos cumple una condena de 8 años de cárcel por los delitos de enriquecimiento ilícito, defraudación y administración fraudulenta. Fue inhabilitado de por vida para ocupar cargos públicos.
Fuente: www.diariouno.com.ar