Cristian Darío Pizarro Rivero tiene 46 años y se encuentra domiciliado en Guaymallén. Lo conocen como el Camionero. En los últimos años, estuvo en la cárcel luego de ser condenado por integrar la banda del jefe narco Raúl Bressi Escalante, quien ganó notoriedad el año pasado cuando este diario reveló que había amenazado de muerte a una fiscal y a una jueza.
Este miércoles durante de la madrugada, mientras esperaba por una intervención quirúrgica y se encontraba bajo custodia del Servicio Penitenciario Federal local, este hombre que traía a Mendoza más de 2.000 kilos de marihuana escondidos en un cargamento de arroz a granel escapó caminando por la puerta de Hospital Central.
Tres horas después de la huida, se realizó un control en la habitación 303, donde se encontraba alojado desde hacía una semana, y observaron que la cama 10 estaba vacía. Un video al que accedió El Sol lo detectó caminando por los pasillos del nosocomio de calle Alem a las 3.24 vestido con una campera azul, pantalón deportivo negro con líneas a los costados y zapatillas marrones.
Fuentes policiales locales contaron que efectivos de Investigaciones de Mendoza comenzaron a trabajar en la búsqueda del sujeto, quien “podría estar merodeando las zonas donde vivía, en calles Belgrano y también en Echevarría al 5700” del citado departamento.
La reconstrucción del hecho sostiene que ingresó un llamado al 911 alertando sobre la fuga de un paciente del Hospital Central. Personal policial se desplazó hasta el lugar antes de las 7 y entrevistaron a los dos penitenciarios federales que tenían a Pizarro Rivero bajo custodia. Detallaron que estaba alojado en el tercer piso y que hacía más de siete días que esperaba por una intervención quirúrgica.
Agregaron que, recién a las 6.30, notaron que ya no se encontraba en la habitación 303 y que analizaron las cámaras de seguridad y se lo vio salir caminando por un sector que da a calle Montecaseros.
Fuentes judiciales y policiales contaron que Pizarro Rivero no cometió ningún delito al salir del efector público, debido a que no ocasionó daños ni atacó al personal médico o los propios guardiacárceles porque “el hombre busca naturalmente su libertad”. Justamente, la responsabilidad penal o administrativa recaería sobre los penitenciarios que lo custodiaban, quien aseguraron que se encontraban afuera de la habitación.
El caso quedó en manos el juez federal Marcelo Garnica. Efectivos de Investigaciones trabajan en la búsqueda del sujeto e iniciaron diversas trabajos para intentar encontrarlo. Al mismo tiempo, trascendió que los agentes -ambos jóvenes- “dormían” cuando el reo decidió huir del edificio.
Pizarro Rivero tiene antecedentes judiciales y policiales desde 1996. Lo han investigado por robos, encubrimiento, amenazas y varias veces por violar la Ley de Estupefacientes 23.737. Por este último delito, fue condenado en agosto del año pasado a seis años de cárcel por el Tribunal Oral Federal Nº2, por integrar el grupo delictivo que transportaba más de 2.200 kilos de marihuana.
Esa investigación nació en San Juan, con el objetivo de intentar desarticular a una banda de mendocinos vinculados al narcotráfico. El jefe narco Raúl Bressi Escalante, detenido en la cárcel federal de Santa Rosa cumpliendo una pena de 14 años de cárcel por transportar 825 kilos de marihuana, coordinaba maniobras delictivas similares a sus antecedentes con la ayuda de otros personajes, entre ellos su hijo y el camionero Pizarro Rivero.
Mediante escuchas telefónicas, supieron que la banda desarrollaban tareas de inteligencia y logística para transportar un millonario cargamento desde el norte del país, específicamente Formosa. Entraron en escena varios personajes y la droga era llevada oculta en un camión que llevaba arroz a granel.
Antes de llegar a la ciudad de Resistencia, el pesado rodado sufrió un desperfecto mecánico. La Gendarmería realizó un seguimiento del camión y detectaron que otro hombre iba marcando punta en otro vehículo. Finalmente, en la localidad de Gutenberg, en Córdoba, los uniformados le cortaron el paso al camión que conducía Pizarro Rivero. Le hallaron en su poder 20 mil pesos, cien dólares y dos teléfonos celulares.
Además, confirmaron que había bultos de dudosa procedencia debajo de las lonas del acomplado. En total, eran 2.474 ladrillos de marihuana que hicieron un peso total de 2.284,69 kilogramos. Luego de esto hubo allanamientos en diversas propiedades y hasta en la celda de Bressi en La Pampa, donde secuestraron más teléfonos celulares y anotaciones que sirvieron para confirmar la hipótesis de los investigadores.
Fuente: www.elsol.com.ar