Las modificaciones planteadas por la oposición para acompañar el proyecto del oficialismo incluyen la quita de retenciones a las economías regionales. En el vino ya eran del 0%.
El Gobierno llegó este jueves por la noche a un principio de acuerdo con la oposición “dialoguista” luego de incorporar una serie de correcciones en los puntos más álgidos del proyecto de ley ómnibus que se debate en la Cámara de Diputados.
Los cambios fueron una condición planteada por la UCR, Hacemos Coalición Federal e Innovación Federal para acompañar el dictamen del oficialismo.
Uno de ellos es la reducción de 2 a 1 año de las facultades delegadas al Poder Ejecutivo con una mayor restricción de las emergencias declaradas. También la implementación de una nueva fórmula de movilidad jubilatoria atada al índice de inflación, o acaso retirar este artículo para discutirlo más adelante.
Pero un punto que el sector vitivinícola mendocino seguía con mucha atención, es el de las retenciones. Según se planteó, se mantendría el 33% de las retenciones a la soja, pero se reduciría a cero los derechos de exportación a las economías regionales.
Esto generó sin dudas un alivio en el sector vitivinícola, que planteaba que la implementación del 8% dejaba al sector con un panorama muy oscuro.
El proyecto impulsado por Javier Milei proponía inicialmente llevar las retenciones al vino del 0 al 8%, lo que generó una movilización de los representantes del sector.
El presidente de la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar), Mario González, expuso hace unos días en Diputados sus argumentos en contra de esta suba a las retenciones del vino planteada en la ley ómnibus.
“Aplicando este 8%, la recaudación sería solamente de 60 millones de dólares. Para el país no es importante, pero para la vitivinicultura sí. Apelo a la capacidad de todos y al sentido común”, sostuvo.
Representantes de Bodegas Argentinas también estuvieron en el Congreso. Walter Pavón, gerente de Relaciones Institucionales, dijo que “todos entendieron el planteo que hicimos, el perjuicio que significa para nosotros a implementación del 8% de derechos de exportación”.
De esta manera, desde el Gobierno de Mendoza vislumbran esta modificación en la Ley de Bases como un “triunfo”, aunque no habría cambios para el sector, ya que las retenciones eran del 0% tras una decisión de la gestión anterior. Al respecto, semanas atrás Alfredo Cornejo había encabezado un pedido expreso al Gobierno nacional indicando que las retenciones de 8% significan para el Estado nacional un ingreso de 60 millones de dólares por año, lo que equivale, según sus cálculos, al 0,005% del Gasto público de la Administración Nacional.
Luego de esta decisión, en general le darían los votos a Javier Milei para que pueda poner en marcha la controvertida ley ómnibus.
Uno por uno, los cambios que tendrá la ley ómnibus del nuevo Gobierno
Luego de un encuentro clave entre los representantes del oficialismo en el Ejecutivo y en el Congreso con los referentes de los bloques legislativos en la oposición confirmaron que se “van a disminuir las emergencias” que en el proyecto original son once. Y las delegaciones serán por un año, y no por cuatro. En este sentido, también se eliminarían una serie de artículos que le garantizaban al gobierno la posibilidad de saltear al Congreso.
Uno de los temas que quedó pendiente es saber de dónde van a sacar recursos para aumentar la recaudación, ya que bajar a cero las retenciones de las economías regionales y no modificar la movilidad jubilatoria genera un hueco en los recursos del Estado. Según De Loredo, que dio una conferencia de prensa al respecto, “no se habló de dónde van a sacar la recursos”.
En paralelo, fuentes del Ministerio de Interior deslizaron que evalúan aumentar las retenciones a productos industriales y a los oleaginosos. Frente al interrogante sobre de dónde saldrán los recursos para llegar al déficit cero, Massot remarcó: “Seguimos insistiendo en el gasto tributario, y dijeron que lo van a analizar”.
Otro de los puntos que se conocieron hoy fue que el Gobierno aceptó sacar a YPF de las compañías que quedan sujetas a privatización. Las otras cuarenta compañías estatales acordaron que, en caso de ser privatizadas, el Gobierno deba mandar los pliegos al Congreso de la Nación para que sean tratados en la comisión bicameral correspondiente, que hace por lo menos diez años no funciona.
En ese punto, HCF le marcó la importancia de que el Banco Nación, Yacimientos Mineros de Agua de Dionisio (YMAD), YPF y Arsat se mantenga con mayoría accionaria del sector público. “No estamos de acuerdo con que se privatice el total, pero podemos discutir si quieren privatizaciones parciales”.
En lo que tiene que ver con el capítulo electoral, confirmaron que “se elimina una gran parte”, en referencia a las circunscripciones uninominales. En cambio aclaró que “sobre las PASO todavía hay discusión”. Este bloque sostiene que este tema no debe ser tratado con la urgencia que el Gobierno pide con esta ley, en el período extraordinario.
Por otro lado, los funcionarios del Gobierno, “insistieron con eliminar el tope de financiamiento privado para los partidos políticos”. “Es algo que nosotros creemos que debe seguir, y ellos dice que quieren blanquear algo que ya ocurre”, comentó el jefe del bloque UCR.
Un rato antes, los mismo dirigentes libertarios se habían reunido con el jerarcas del PRO, Cristian Ritondo y María Eugenia Vidal. “Vamos bien encaminados con los últimos detalles del proyecto de ley para que la tratemos la semana que viene. Están tomando muchas sugerencias que hicimos, y se modificaron cerca de 100 artículos en ese sentido”, indicó el hombre de Mataderos al salir del encuentro. Por su parte, el diputado ultrabullrichista Damian Arabia tuiteó la típica foto de la fumata blanca en el Vaticano.
Un rato antes de las 22.30, después de horas y horas de reuniones y negociaciones, los diputados dialoguistas bajaron del primer piso por las escaleras y salieron por la calle Combate de los Pozos, para esquivar a los cronistas de radio y televisión, que los esperaban en avenida Rivadavia.
FUENTE: Mdzonline.