Ivana Molina tenía 39 años la última vez que la vieron en abril del 2023. A un año de su desaparición, su familia cree que el autor del femicidio fue su ex pareja, Carlos Díaz, de 65 años, quien está preso a la espera del juicio a pesar de que el cuerpo de la mujer nunca se encontró. Mayra Molina, hermana de la víctima, agregó que creen que alguien más participó en el hecho, pero que el imputado se niega a declarar.
“Sentimos mucha incertidumbre”, expresó Mayra Molina. “Ya pasó un año y no se sabe nada de mi hermana. Solo nos queda esperar el juicio a ver qué pasa con Carlos Díaz, ver cuál sería su condena. Es lo único que nos queda”, se sinceró. Pero todavía no hay fecha.
Carlos Díaz está preso e imputado por homicidio agravado por el vínculo y por mediar violencia de género, lo que prevé una pena de prisión perpetua en caso de ser encontrado culpable.
“Por las pruebas que hay, sabemos que él es el homicida de mi hermana, está detenido y está imputado. Seguramente como ya se cumplió un año vendrá el juicio para que lo condenen”, indicó Mayra Molina.
A pesar de haber pasado un año, el cuerpo de Ivana Molina no fue encontrado hasta el momento. “Para mí quizás hay otra persona más involucrada en todo esto y que posiblemente él está cubriendo. Es la única opción que me queda para pensar: que por eso no declara ni dice qué hizo con ella o con su cuerpo”.
Además, la hermana de la víctima expresó: “Es terrible no tener un lugar ni saber dónde está ella, es una agonía que no termina más el no habernos podido ni despedir. Si sus hijos le quieren llevar una flor, no tienen dónde. Es una situación terrible, traumática”.
El femicidio de Ivana Molina
La fiscal de Homicidios Claudia Ríos determinó que el 7 de abril del 2023 Carlos Díaz asesinó a Ivana Molina en su casa del barrio Las Rosas, de Las Heras, donde la Justicia ordenó varios allanamientos pero sin encontrar el cuerpo de la mujer. Fue su sobrina quien advirtió que algo pasaba, ya que no podía comunicarse con ella, e hizo la denuncia.
Carlos Díaz fue citado a declarar y se presentó ante la justicia donde dio su versión e indicó que hacía tiempo que no la veía. La causa avanzó y con el correr de los días las pruebas apuntaban al hombre de 65 años.
Al ir a buscarlo a su casa nuevamente, no lo encontraron. Fue capturado varias semanas después en Buenos Aires, hasta donde había viajado en remís, el cual le había salido $60.000 en aquel momento.
Al regresar a Mendoza fue imputado por la fiscal Claudia Ríos y pasó directamente al penal. En su casa habían encontrado manchas de sangre que pertenecen a Ivana Molina, pero la excusa del sospechoso fue que ella había ido a su casa a pesar de estar separados y tuvieron relaciones. Dijo que la mujer menstruaba en ese momento y por eso había sangre de ella.
En la audiencia de prisión preventiva se reveló que las pericias psiquiátricas indicaron que “es impulsivo, con reacciones agresivas, con poca tolerancia a la frustración. Tiende a negar los conflictos, minimizarlo, y con relato tendiente a victimizarse“.
Además, Ríos sostuvo que la acusación en su contra prevé una pena de prisión perpetua, y que no podía recibir el beneficio de prisión domiciliaria, ya que había riesgo de entorpecimiento de la investigación, además de que también existía el peligro de fuga. “Sabemos que no se va a someter a proceso”, expresó la fiscal y el juez decidió que quedara en prisión mientras se avanzaba con la investigación.
Fuente: www.diariouno.com.ar