Un hombre que se encontraba internado por sufrir un balazo en abdomen y quedó detenido por un asalto a disposición de la Unidad Fiscal de Robos y Hurtos escapó la madrugada de este martes del Hospital Lagomaggiore de Ciudad acompañado por una mujer sin que la consigna policial lo notara.
El caso comenzó a ser investigado por la Justicia y también la Inspección General de Seguridad (IGS), que buscaban esta jornada determinar si el efectivo incurrió en responsabilidades penales y administrativas, respectivamente, ya que tenía la tarea de custodia por orden judicial.
Cámaras de seguridad detectaron al sujeto huyendo con una chica que llevaba una mochila azul con detalles amarillos. La primera hipótesis señala que el uniformado, con destino en Comisaría 36ª, “se quedó dormido”.
De acuerdo con la información a la que accedió El Sol, el sujeto que escapó del nosocomio ubicado en Capital fue identificado como Nicolás Alberto Ávila y permanecía alojado en calidad de aprehendido en una instrucción que lidera el fiscal Daniel Sánchez Giol, luego ser atacado el domingo por la noche con armas de fuego mientras caminaba con dos amigos por Las Heras.
La reconstrucción de la evasión sostiene que Ávila, de 30 años, permanecía alojado en la cama 2 de la habitación 2010, ubicada en el segundo piso del efector público. Como guardia del detenido fue designado un efectivo de 22 años oriundo de San Rafael, quien lo “habría perdido de vista” por causas que son motivo de investigación.
Las fuentes aportaron que, cuando ingresó a la habitación, Ávila ya no se encontraba, por lo que notificó la situación al CEO. De inmediato comenzaron a trabajar desde la Oficina Fiscal Nº2 y el procedimiento fue informado a la Unidad Fiscal de Robos y Hurtos. Al mismo tiempo, se notificó a la IGS y Asuntos Internos inició el sumario correspondiente.
Por lo que registraron las cámaras de seguridad, Ávila caminó con su acompañante por los pasillos del nosocomio a las 5.42, por lo que investigadores estimaron que esa fue el horario de la huida.
Ávila fue baleado la noche del domingo, antes de las 22, mientras circulaba a pie con dos amigos por calles Libertad y Fleming de Las Heras. Los testigos describieron que, en un momento, un sujeto al que conocían comenzó a dispararles sin mediar palabras.
Uno de los plomos impactó en el abdomen de uno de ellos y los amigos lo llevaron hasta el Hospital Carrillo, desde donde luego se decidió su traslado al Lagomaggiore. Cuando lo identificaron, los efectivos confirmaron que tenía un pedido de captura desde el 8 de abril, emitido por la Unidad Fiscal de Robos y Hurtos.
El fiscal Sánchez Giol lo buscaba por un robo agravado ocurrido en para esa fecha en Lavalle. Junto con otros personajes, Ávila habría cometido un asalto y escapó en un vehículo que fue abandonado cerca del barrio Santa Teresita de Las Heras tras una persecución con policías.
Cuando Policía Científica trabajó en el auto que dejó la gavilla, levantó muestras genéticas que sirvieron para realizar un cotejo con la base de datos que contiene miles de perfiles de personas que han cometido delitos, el que terminó siendo positivo.
Fuente: www.elsol.com.ar