Quién es el asaltante que desató una crisis en el Hospital Central de Mendoza

Rubén Omar Bastías fue detenido luego de un asalto en la Plaza Independencia y testigos quisieron lincharlo. Sufrió heridas y en el efector público de Capital atacó a otro paciente y quiso arrojarse desde varios metros de altura.

0
36

Rubén Omar Bastías, un hombre de 50 años con antecedentes penales y con viejos domicilios en Las Heras, era conocido en Capital por su situación de calle y conductas delictivas. Su historia personal lo llevó a enfrentarse a la ley en más de una ocasión, reflejando un ciclo marginalidad en el que ha estado inmerso, destacaron fuentes policiales que hablaron con El Sol.

Este domingo, Bastías protagonizó una serie de hechos que comenzaron en la Plaza Independencia, cuando intentó robarle el celular a una joven de 23 años con un arma blanca de gran tamaño.

La acción violenta desató una persecución por parte de los transeúntes que observaron la agresión, que culminó con su reducción y una golpiza que lo dejó con politraumatismos y una herida en la cabeza. La rápida intervención de Preventores y policías permitió su aprehensión y el aseguramiento del arma.

Tras ser detenido, Bastías fue trasladado al Hospital Central para ser atendido por las lesiones. Sin embargo, su comportamiento violento no cesó: en medio de la atención médica, agredió a otro paciente y amenazó con lanzarse al vacío desde una ventana.

Esta situación desencadenó la intervención de los negociadores del Grupo de Resolución de Incidentes y Secuestros (GRIS), quienes tuvieron que mediar en una situación que puso en alerta tanto al personal hospitalario como a las fuerzas de seguridad.

Finalmente, minutos antes de las 21, Bastías depuso su actitud y se entregó, permitiendo que fuera contenido y asegurado por la policía.

Todo había comenzado en la Plaza Independencia, corazón del centro mendocino. Fue el escenario este domingo de un violento episodio que culminó con el delincuente hospitalizado y una joven conmocionada por el asalto sufrido.

Eran las 18.35, cuando una chica de 23 años oriunda de Guaymallén esperaba el colectivo de la línea 900 en la parada ubicada en la intersección de Patricias Mendocinas y Espejo. Lo que parecía ser una jornada tranquila, giró a momentos de pánico cuando un hombre en situación de calle, identificado como Rubén Omar Bastías, se le acercó con una aparente solicitud inocente: pedirle un cigarrillo.

Sin embargo, se trataba de un hecho de inseguridad. Todo sucedió en cuestión de segundos: el malviviente aprovechó cuando la víctima bajó la guardia para arrebatarle el celular, y cuando ella intentó resistirse, sacó un cuchillo de grandes dimensiones. Un turista rionegrino, que se hospedaba en un hotel cercano, fue testigo directo del hecho.

La amenaza con el arma blanca desató una persecución que se internó en el popular paseo céntrico. En su intento de fuga, Bastías no contaba con la reacción de los transeúntes quienes, indignados por el asalto, decidieron intervenir para frenarle el paso. La persecución culminó en la esquina de la intersección de calles Espejo y Mitre, donde un grupo de ciudadanos logró reducir al asaltante.

En ese momento, se vivieron los primeros momentos de tensión: los presentes intentaron hacer justicia por mano propia y comenzaron a golpear al señalado delincuente.

A los pocos minutos, llegaron hasta la escena varios preventores de Capital. El equipo arribó justo para realizar la aprehensión. Por su parte, dos preventoras se encargaron de resguardar el arma blanca, que el delincuente había descartado durante la huida.

La violencia del forcejeo con los ciudadanos dejó sus marcas: Bastías, nacido el 26 de junio de 1974 y con domicilios en Las Heras, debió ser atendido por médicos de una ambulancia. Una doctora diagnosticó politraumatismos varios y una herida cortante en el cuero cabelludo, por lo que se requirió su traslado inmediato al Hospital Central, donde luego protagonizó una crisis nerviosa.

Fuente: www.elsol.com.ar

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here